Realmente tendría que decir tras los focos de Nina Dobrev, una de sus protagonistas.
Normalmente pensamos que detrás de producciones profesionales tenemos equipos profesionales. Y es verdad. Lo que ocurre es que tenemos una idea muy equivocada de lo que es profesional. Ni significa que todas las fotos salgan bien, ni que los estudios fotográficos sean de película.
Para muestra los siguientes ejemplos.
Primero una fotografía de promoción de la serie de TV, obtenida de Formula TV (lo siento, no he encontrado la original con calidad).
Me gusta la foto. La composición, la ambientación y el procesado.
¿Cómo sería una foto real de la sesión?
Vaya … vaya … parece que les ha salido un poco «quemadilla».
¿Y cómo sería una sesión de fotos con su protagonista?
Uff. Una foto así seguro que requiere de un equipo de iluminación y puesta en escena sólo posible en un estudio profesional.
¿Seguro?
Antes que un estudio profesional piensa que realmente lo que te hace falta es confianza en ti mismo/a.
Las cosas por ahí fuera nunca son como las pintan (o como las imaginamos).